Lo mejor de Sex and the City cedida por HBO y Max. Pero si solo tienes que ver un programa de Netflix este abril, entonces el que no te puedes perder es Black Sails.
En 2014, Starz lanzó Black Sails como una serie original en la línea de Espartaco, así como la efímera Camelot. Este también era un panorama televisivo posterior a Game of Thrones, y Starz quería causar su propio revuelo. Dado que HBO tenía un control tan mortal sobre el género de fantasía, Starz siguió adelante con un programa que es a la vez una epopeya histórica y también una precuela de la clásica novela de aventuras de Robert Louis Stevenson, La isla del tesoro. Incluso si nunca has leído el libro de Stevenson, casi todo el mundo ha oído hablar de su personaje más icónico, Long John Silver. Y aunque juega un papel importante en Black Sails, el enfoque principal está en un personaje menos conocido de Treasure Island: el capitán James Flint.
Flint en realidad no aparece en La isla del tesoro, pero es su tesoro lo que todos buscan en ese libro. Eso le dio a los creadores de Black Sail una tremenda libertad para desarrollar la identidad y la historia de fondo de Flint, al tiempo que lo colocaba entre una serie de personajes originales, así como piratas reales que vivieron durante esa época. Black Sails no se juega como una lección de historia, pero tener un pie en la realidad agrega algo de peso al drama.
Si esperas una fantasía similar a la de Piratas del Caribe, no la encontrarás aquí. Black Sails tiene la clasificación R de los dramas televisivos. Es perfecto para los espectadores de Netflix y, de hecho, puede obtener una audiencia más grande en este transmisor que en Starz. Pero si necesitas más convencimiento, estas son las razones por las que deberías ver Black Sails en Netflix en abril.
Black Sails tiene un increíble elenco de personajes
Toby Stephens lidera la serie como James Flint, con Luke Arnold como Long John Silver. Ambos hombres son muy convincentes, pero este programa también tiene un elenco coral que sirve a su enfoque más amplio y a las múltiples historias que sigue. Hannah New ofrece un giro convincente como Eleanor Guthrie, la mujer aparentemente a cargo del santuario pirata New Providence. Por su propia naturaleza, los piratas son difíciles de controlar, y el control del poder de Eleanor casi siempre corre el riesgo de desaparecer.
Además de dar cuerpo a los personajes secundarios, la serie también los vincula a las vidas de los piratas reales, incluida Anne Bonny (Clara Paget), que encuentra el romance con una mujer llamada Max (Jessica Parker Kennedy). Además de Bonny, la serie cuenta con Charles Vane (Zach McGowan), Jack Rackham (Toby Schmitz), William «Billy Bones» Manderly (Tom Hopper), Edward «Blackbeard» Teach (Ray Stevenson) e Israel Hands (David Wilmot). Casi todos esos nombres son legendarios en la tradición pirata, y es muy agradable verlos desempeñar un papel en el desarrollo de la historia de la serie.
Presenta batallas en alta mar
Es posible que Black Sails no haya podido igualar a Game of Thrones en términos de escala, pero hay momentos en los que el programa realmente va a por todas con sus escenas de acción. Esta serie es particularmente impresionante durante sus batallas navales, que no siempre terminan bien para los piratas. Hay algo más que preocuparse por la Armada inglesa o los piratas rivales: el océano en sí puede ser mortal para los hombres en el mar.
Esta serie sobresale en sacar el mayor dramatismo de sus batallas, e incluso podría hacerte preguntarte qué personajes se supone que deben sobrevivir, porque en Black Sails, incluso los piratas de la vida real no tienen necesariamente garantizado que salgan vivos.
Cada temporada aumenta las apuestas
Ha habido algunos fanáticos que están en desacuerdo con la forma algo abrupta en que terminó Black Sails, y es un punto de división en la base de fanáticos. Independientemente de dónde caigas en eso, pocos podrían negar que el programa hizo un trabajo magistral al construir su narrativa en el transcurso de su viaje de cuatro temporadas.
Mucho de eso se reduce a Flint y Silver. A lo largo de la serie, sus destinos están entrelazados y se necesitan mutuamente para sobrevivir. Incluso frente al desastre, Silver y Flint todavía tienen puntos en común entre ellos.
Mirar Black Sails en Netflix.
